Gracias por vuestros comentarios
. Os traigo una buena nueva...
¡¡¡¡¡¡¡AYER LA ABRACEEEEEEEEEEEÉ!!!!!!!Montse, tenías razón. En el momento menos esperado.Yo sé que esas cosas no se planean, pero mira, yo necesito hacerlo porque me ayuda a concienciarme de hacerlo. De otro modo, estos momentos así, que salen sin planearlo, no me saldrían si no tuviera plena conciencia de querer hacerlo.
Os explico cómo fue:
Estuvimos colaborando hace un tiempo con un hospital, junto con otro grupo. El otro grupo iba a ir a visitar el hospital, pero a nosotras nos dijeron que no podíamos y que nos teníamos que esperar al año que viene (Claro, dos grupos serían multitud). Nos quedamos un poco choff después de todo (Bueno, se quedaron, yo me conformé con ir el año que viene). Entonces, ayer, esta persona dijo que como vio que nos habíamos quedado mal por lo de no poder ir a visitar el hospital, pues nos había traído una sorpresa. Nos asignó un número a cada una y fuimos cogiendo por ese orden la sorpresita, que era una pulsera.
Yo veía que todas las que pasaban a buscarla, le daban dos besos. Ayer yo no estaba anímicamente bien, pero igualmente pensé: ésta es la mía. Y cuando llegué yo, que tenía el número 15, cogí la pulserita que quise y la miré (No a los ojos, claro). Ella con las otras hacía el gesto de lanzarse a dar dos besos. Conmigo no lo hizo, que eso me gustó porque, como siempre, se mostró respetuosa con eso de que a mí no me gusta. Pero entonces, me acerqué a ella y ella se pensó que iba a darle un par de besos, así que extendió los brazos para agarrarme y dármelos con cara de sorpresa (Parecía como si dijera: ¡Ah! ¡Me vas a dar dos besos! O.O), pero para su mayor sorpresa aún, lo que le di fue el abrazo. El grupo enteró se enterneció con la escena. Luego pregunté por la cara que puso ella y me dijeron que cara de sorpresa, pero de sorpresa muy agradable, que se le notaba la alegría que sentía, vaya. Otra me dijo que era como si dijera: "Menos mal, ya era hora".
No sé, fue genial. Yo me sentí muy bien, aunque acabé medio llorando y tuve que salir e ir al lavabo para tranquilizarme. No sé, me encantó.
Ayyyyy... ¡¡Por fin lo he conseguido!!