AVENes

No os alegréis, ewigkeit, mercurio etc. No me voy del foro.
Me voy de la sociedad. Renuncio a la competitividad que nos domina. Me niego a seguir luchando por un trabajo de prestigio, poder o dinero.
Reconozco que he trabajado mucho menos de lo que la mayoría ha hecho para conseguirlo, que mis sueños y mi búsqueda del sentido de la vida me han hecho perezosa de alguna forma.
Pero he trabajado lo suficiente como para tener algo de eso, y he demostrado ser lo bastante buena ¿Porqué no me dan lo prometido?
Primero te dicen: "debes trabajar hasta x" y tú te esfuerzas, llegas a x y cuando vas a reclamar el pago te dicen: "hay demasiados con x, sólo lo damos a los que tienen x+1" y así hasta el infinito, como la zanahoria que le ponen a los burros delante atada con un palo.
Deseo dinero, prestigio y todo eso, pero me niego a vender mi vida y mi alma a cambio de ello.

Me niego a trabajar 18 horas diarias entre estudios, reuniones de empresa y demás.

ME ESCONDO EN MIS SUEÑOS
Exacto, son míos, nadie me los puede negar, están aquí y ahora. Y a fin de cuentas el dinero, el poder y el prestigio son igual de ilusorios y terminan con la muerte.
¿Porqué perseguimos dinero, prestigio y poder? Poder para que no nos domine nadie, vale. dinero para satisfacer las necesidades vitales y espirituales también. Supongo que el prestigio también valdrá para algo.
Pero si ya no nos domina nadie y podemos satisfacer nuestras necesidades ¿para qué más? Con un trabajo mal pagado, poco prestigioso o de poco poder podemos vivir igual.

La competitividad arruina la vida de mucha gente. Algunos llegan hasta el asesinato por ganar, como la madre japonesa que mató a una niña para que su hijo tuviese plaza en una guardería prestigiosa.
Cuando se está obsesionado por ganar no se disfruta el camino para conseguirlo, se demora el placer hasta lograr una meta que parece cada día más lejana porque nunca se tiene bastante y cuando al fin se llega, es tal el cansancio y la necesidad de mantenerse en el puesto que no se es capaz de disfrutar de lo conseguido. Y la jubilación no se toma como el descanso merecido, sino como un insulto.

En fin, adiós, sociedad competitiva, hola, sueños.

Sí, todos podemos hacer algo, el problema es encontrar quien te pague por ello para que puedas considerarte un éxito.
A partir de ahora voy a considerarme un éxito aunque tenga que trabajar de limpiadora.
El que los demás no estén dispuestos a pagar por mis pensamientos y mis obras artísticas no los hace necesariamente malos o inútiles. Yo tengo la formación adecuada y soy original. Si los demás no lo quieren ver, es su problema.

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Desde luego. hasta te obligan a prostituirte. no el cuerpo, claro, sino el alma: te obligan a ocultar los libros y las películas que te gustan porque no concuerdan con la ideología de la empresa o la institución pública o privada. y siempre tienes miedo a que te descubran.

Entiendo tu posición a la perfección, yo mismo casi entro ahí hace no mucho tiempo. Deja que te diga mi opinión acerca de nuestra existencia y el sentido que tiene. En primer lugar no comparto la idea de Ewigkeit (y la de muchos otros filósofos): la existencia como razón de esta, yo no soy solo por ser. Dices que los sueños son tuyos, que representan tu verdadera cara, pero, ¿es eso cierto? ¿Es nuestra existencia aquella que no sale a la luz de los demás? Muchas personas, marginadas al sociedad o asociales (no deseo insultarte aunque sí dejártelo claro), se esconden tras la excusa de ¨al menos en la soledad soy yo mismo, por qué iba a aguantar la presión del grupo, los problemas para llegar a fín de mes..., estoy mejor sin el mundo¨ o, como tú misma has dicho, ¨Exacto, son míos [los sueños], nadie me los puede negar¨. ¿Realmente son tuyos? Tengamos en cuenta que con ¨tuyos¨ me refiero a la profunda existencia propia de cada uno, es decir, ya sé que los has pensado tú y que están cimentados sobre tus gustos y preferencias, sin embargo opino que reflejan tu verdadero ser. Quizás te suene la frase formulada por Ortega y Gasset: ¨Yo soy yo y mis circunstancias [...]¨. Es obvio que vivir esclavo de la sociedad, de las demás personas, tampoco define la verdadera existencia de nuestro ser, sin embargo opino que el ser humano solitario es un monstruo, es decir, no es humano, y el humano falso, el que lleva una máscara ante sus circunstancias, no es más que la simple máscara que lleva, por lo que tampoco es humano. Personalmente creo que la razón de tus sentimientos, es la falta de un objetivo en tu vida, la falta de un concepto de felicidad. Estés de acuerdo o no con mi opinión, me interesaría oír una respuesta.

Me temo que a pesar del pesimismo de mis palabras, yo tambien la he encontrado. Ahora me queda no dejarme dominar por las ideas que el mundo insiste en meterme dentro otra vez.
La soledad no es la felicidad, pero yo estoy de lo más acompañada, aunque no tenga ni hijos ni pareja, así que no me afecta.
No seré feliz por tener a una persona como pareja, de eso estoy segura, porque las personas vienen y van, cambian, mueren, y además a veces se ponen insoportables.