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| As de diamante |
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Registrado: 23 Jun 2007, 01:03
Mensajes: 1560
Ubicación: México
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Desde el año pasado me hice de mi propia casa, la cual aprovecho más como lugar de descanso que hogar, pues la visito cada fin de semana, me es útil para leer, tocar un teclado musical, cultivar mis plantas, estar filosofando sobre mí, en lo que siento, pienso, quiero, hago, y me gusta pues la paso bien en ella, es pequeña y confortable.
El resto del tiempo la paso en casa de mi mamá, la cual está más céntrica, es más grande y cercana a mi trabajo, me ayuda estar en los dos lugares, el cambio de panorama es favorable también.
Soy sociable y cordial, cuando estoy en casa de mi mamá y salgo a barrer la banqueta, algunos vecinos se acercan para dialogar, y es notorio su interés de emparejarse, pues no pierden oportunidad para invitar a salir, bueno, como amistad digo sí, y les mantengo en la posición de amistad.
Al llegar a la nueva casita se me acercaron algunas damitas para darme la bienvenida, lo que agradecí y retribuí también con detallitos; cada vez que estoy fuera de casita, saludo a mis vecinos con alegría y formalidad, sin embargo noté que mis vecinas se encelaban cuando saludaba a sus maridos, las comprendo, ellas son amas de casa y quizá vean peligro en toda mujer que se acerca su familia, soy observadora y detallista, por lo que ahora tomo precauciones para evitar que se encelen y seguir siendo tan afable con las personas sin distingo.
Soy una persona de valores por lo que al mirar a un hombre casado por muy atractivo que sea no me llama la atención para pareja, pues en primera, pienso en el compromiso que tiene con su pareja y sobre todo con su familia, sea divorciado, viva en unión libre, amasiato, o como sea, no pongo interés en persona comprometida, respeto mucho eso, sobre todo al sentir de los infantes, los cuales obviamente desean ver a su progenitores amándose en armonía, mis vecinas al saber que soy soltera se inquietan, mi madre también lo ha notado, así que mi tacto y ética me libera de tal circunstancia.
Definitivamente no voy a casita a ver que pesco, y menos el marido ajeno, jaja, eso nunca, hay tantas personas solteras para buscarme problemas, incluso en el trabajo, algunos compañeros no quitan el dedo del renglón de que iniciemos algo, solo que son tan sexuales que no me atraen, he salido con ellos varias veces, la paso bien, pero insisten en llegar a la intimidad, lo cual evito pues ni siquiera me atraen como pareja y los que me llegan a atraer por tener su propia pareja dejo de interesarme en ellos definitivamente, no hay prisa por tener pareja, puedo vivir en un amor platónico por mucho tiempo aun sin ser correspondida, me basto a mí misma y el amor de la familia me ayuda, para mi el tener pareja es posible siempre y cuando el requisito imprescindible es que no existan terceros, nunca lastimaré a otra persona por fijarme en alguien, eso lo tengo muy claro.
Mis vecinos desconocen mi asexualidad, mi familia y amigos no, como soy sociable y amable además de soltera, quizá confundan una atención con un coqueteo, ver a una mujer de 45 años alegre, sola y sociable, seguramente les crea esa confusión, más les veo como herman@s, luego bromeo comentando a mis familiares, puf, y “eso que subí de peso,” por lo visto, ni eso frena el instinto sexual de los sexuales, ahora que estoy a dieta tampoco cambiaré de posición.
Feliz próximo año 2011, [sigo pensando algunos cambios que realizaré  ]
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y arrepiento sinceramente, lo sabe y me comprende pues lo hemos dialogado, fue como querer experimentar en otra persona lo que creí me faltó; pensé "el sexo", pero nop, esta otra persona, mi tierna amistad, muy coherente e inteligente me fue ayudando a despejar lagañas y visiones, me ayudó a salir del laberinto de confusión y desilusión en el que andaba, "se pierde mucho en ello", y se que me equivoqué al tratar de ser sexual pensando que esa era la solución, estoy a gusto siendo asexual, estoy tranquila otra vez, serena, y muy agradecida con esa persona tan maravillosa, mi amistad asexual que me hizo reaccionar, me lee, me tolera y da la mano amiga para levantar, y continuar el viaje por la vida, la experiencia es amar tal cual somos, sin apego, solo amar y aceptarnos así, me siento bien, soy asexual, soy normal, puedo dar y recibir acordando cordialmente y en armonía con la persona amada, y conocí una parte de lo desconocido de mí, es decir nadie nos conocemos realmente hasta que pasa algo tan fuera de control para nosotros, pues yo, que nunca acosé a nadie en mi vida, lo hice con la persona más buena que he conocido en un momento de dolor y confusión, quizá la confianza que me mostró y di, me hizo perder el horizonte y es feo, muy pesadillezco, ya salí de eso y espero jamás volver a caer tan bajo, que bueno que me ayudaste amistad asexual, gracias estoy en deuda contigo