Se dice que en la antigüedad existía un rey semi-barrbaro que administraba la justicia de un modo a la vez espectacular y caprichoso. Para castigar los delitos, situaban al acusado en el centro de la arena de un circo ( cuyas gradas eran ocupadas por la multitud) y le daban a elegir entre dos puertas. Tras una puerta aguardaba un Tigre, el cual lo deboraria sin pensarlo, y en la otra se encontraba una atractiva doncella. Así el reo debía de elegir su "suerte" de una manera forzosa; si aparecía el tigre, moría y si aparecía la doncella debía de esposarla sin mayor dilación.
En cierta ocasión, un plebeyo se dedico a cortejar a la única hija del antes mencionado barrbaro, y ella le había correspondido clandestinamente a su amado. Así pues fue condenado a ir a la arena y decidir una vez mas entre las dos puertas, la que contenía el tigre o la doncella ( y nadie mas excepto el rey sabia donde se escondían cada uno). Pero la hija del barrbaro se esmero en encontrar el secreto y averiguo en que puerta estaba cada candidato, y cuando estando su amado en la arena aguardando para decidirse, ella le dijo que eligiera la puerta de la derecha, dado que le había dicho que lo salvaría ( el problema residía en que, en ambas opciones ella perdía algo, si salía el tigre, su amante moriría, pero si salía la doncella, esta se esposaría con el y su amor jamas seria correspondido de nuevo...)
¿Que había en la puerta de la derecha? ¿La dama o el tigre?
_________________ "Yo no creo en nada. Para mí la fe es algo tan odioso como lo es pecado para los creyentes. El que sabe, no puede creer. El que cree, no puede saber. El término "fe ciega" es una redundancia, pues la fe es siempre ciega" Ernest Bornemann.
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