Entiendo (aunque no comparto en su mayor parte) el punto de vista vegano. Digo que no lo comparto en su mayor parte por varios motivos.
Uno, me gustan las proteínas animales. No lo puedo evitar. Me gustan. Quizá no esté de acuerdo en que los animales tengan que ser sacrificados con sufrimiento, o maltratados, pero creo que se podría mejorar esa parte del tema y yo seguiría comiéndome los animales y peces, porque me gusta ese tipo de proteínas (y grasas). El veganismo, obviamente, es una elección, y tal y como yo respeto a los que deciden practicarlo, así también me gustaría que los veganos respetaran a los carnívoros, cosa que, en la mayor parte de los casos (no en todos) no observo. Veo ataques, críticas e insultos a los que consumimos animales. No me parece correcto. Ni soy una asesina por comerme un filete de vaca, ni es mi culpa que a la vaca se la mate con sufrimiento. No porque yo deje de comerme a la vaca, ésta va a dejar de sufrir. Al que habría que insultar es al gobierno que no pone leyes específicas de protección animal, no al usuario. Y si no quieres que yo te convenza de comer carne, deja tú de intentar evangelizarme para dejar de comerla. Gracias.
Dos, el veganismo es una elección. Está bien que tú decidas ser vegano, pero si tienes una mascota no la conviertas en vegana porque tú lo eres. Estoy harta de ver veganos que tienen un gato y que lo alimentan con un pienso basado en proteínas vegetales. Para mí eso es maltrato animal. Es ir en contra de la naturaleza del animal y es maltratarlo. Está probado que el gato (y donde digo gato, digo hurón, o perro) es un animal estrictamente carnívoro que apenas obtiene aminoácidos esenciales para vivir de las proteínas vegetales. Alimentarlo con algo distinto a "chicha" es perjudicar a su salud. ¿Quieres un animal vegano? Ten por mascota un conejo. Pero si tienes un gato, un perro, o un hurón, dales de comer lo que deben comer por naturaleza. Bastante que tienen que aguantarse con un pienso, por lo menos que esté hecho de carne.
Tres, el veganismo no asegura una dieta más sana. Es verdad que las grasas saturadas procedentes de carnes rojas y pescados azules pueden provocar colesterol, pero es como todo. Todo es necesario en su justa medida. No comer carnes rojas más de una vez a la semana, no comer pescados azules más de una vez a la semana. Y alimentarse de carnes y pescados blancos el resto del tiempo, así como de proteínas vegetales y hortalizas. Por lo que tengo entendido (no lo he probado, luego no lo sé, pero una amiga vegana me lo ha comentado), muchos veganos necesitan complementos alimenticios de vitaminas y minerales e incluso grasas (omegas 3 y 6) que no ingieren con su dieta porque es incompleta. Os recuerdo el caso de una niña a la que tuvieron que ingresar porque los padres eran veganos y la alimentaban a base de arroz, verduras y patatas, hasta que su malnutrición alcanzó un límite enfermizo. Evidentemente, se habían dejado las proteínas por el camino entre otras cosas y la alimentación era peor de lo que podía ser, pero en cualquier caso, creo que jamás se debería tomar esa decisión por nadie. Dado que es una elección, que elijan cuando tengan la capacidad de hacerlo y si tienen que poner su salud en peligro que lo hagan por propia decisión y no por la de nadie más.
En cuanto a las mascotas. Adoptar no convierte a una persona en responsable. Hay tantos abandonos de animales adoptados como comprados. El irresponsable es el propietario no el criador. Mi opinión a este respecto es controvertida, y lo sé, pero desde que tengo gato (abandonado por alguien y recogido de la calle, por cierto), mi percepción al respecto ha cambiado bastante. Los irresponsables son las personas. Como tal, hay protectoras irresponsables que tratan a los animales como objetos, que los tienen hacinados, enfermos y muriendo unos encima de otros, o sacrificándolos por falta de espacio para que entren más animales a morir. Y hay criadores que tratan a los animales como reyes, hacen un seguimiento de las familias a las que venden sus animales y si, por el motivo que sea, el animal no puede seguir con su familia, lo recuperan y una de dos, o le buscan otra familia o se lo quedan ellos en su casa. Entre estos dos extremos hay toda una gama de posibilidades que dependen de las personas que componen las organizaciones.
En general, las protectoras hacen un trabajo encomiable. En general, es más recomendable adoptar que comprar, puesto que adoptando salvas dos vidas, la de tu mascota y la de la mascota que ocupa el lugar de la tuya en la protectora. Pero esto es en general. En particular un propietario irresponsable, será irresponsable independientemente de la procedencia de su mascota. Luego están los juntagatos/juntaperros, que son propietarios que tienen una parejita y que la hacen criar por diversión y luego intentan sacarse un dinero con la venta de los cachorros. Esta gente NO son criadores. Un criador RESPONSABLE debe tener un afijo, debe testar a sus ejemplares de enfermedades, debe socializar a los animales y debe entregarlos con cierta edad y con el pedigrí. Estos criadores responsables, de los cuales, desde que tengo gato conozco a unos cuantos, es gente muy preocupada por los animales. No sólo los suyos propios. En general, de la venta de los cachorros sacan el dinero justo para pagar los gastos veterinarios, las vacunas, los papeles, las pruebas y tests de enfermedades que aseguran una línea sana y la alimentación y salud ambiental (espacio en casa, juguetes, rascadores, camas, biberones) de los animales. Muchos de estos criadores crían por hobby, mientras viven de otros trabajos "más serios", y el poco beneficio que obtienen de la venta de los gatos lo emplean en AYUDAR A ANIMALES DE LA CALLE. Tal cual. Se dedican al control de colonias, a pagar facturas veterinarias de protectoras y cosas por el estilo, porque son amantes de los animales, no del dinero. No digo que todos sean así, pero el mundo de la cría está muy demonizado y no es justo. Sólo hay que querer mirar un poco dentro y preguntar. Yo he conocido, por mera casualidad, pidiendo ayuda porque era primeriza con mi gato y no tenía ni idea, y la ayuda me la han dado ellos, a varios de este tipo de criadores y se me ha abierto un mundo nuevo. Y, desde luego, también se me ha caído la venda de los ojos con respecto a protectoras, que no quieren saber nada del control de las colonias que caen bajo su jurisdicción, por ejemplo, porque "ya tienen bastante con lo suyo".
Todo esto lo cuento aquí porque está genial la carta de la perrera. Pero no es la única visión que hay. Y mostrar una cara de la moneda a base de hablar mal de la otra cara es injusto. Al final, todo se reduce a personas. Responsables, irresponsables, amantes de los animales y amantes del dinero, los hay en todas partes. En las ONG's, en las protectoras, entre los criadores... Se hace una publicidad muy mala y es injusto. La mayor parte de consejos valiosos que yo he recibido con respecto a mi gato han venido de criadores, que no ganaban nada ayudándome y que colaboran activamente con protectoras, y adoptan animales callejeros (y los tienen conviviendo con sus animales de raza), no de protectoras. Me sabe mal que se les demonice de esta manera.
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