Dentro de la comunidad conviven tres orientaciones. Tres orientaciones diferentes. Hoy vamos a hablar de la grisexualidad. Se denomina grisexual a la persona que experimenta atracción sexual hacia otras personas sólo bajo unas limitadas y específicas circunstancias u ocasiones. Se puede dar que un gris-asexual sienta atracción sexual con menor intensidad y/o con menor duración en el tiempo que un alosexual y/o por motivos contextuales.

Yaiza es una muchacha de Canarias; ella nos cuenta:

“Durante la adolescencia, o incluso iniciándola te ves algo distinta, diferente a los demás. Observas como los tus compañeros experimentan atracción sexual, ese deseo de conectarse con el otro sexualmente, no coincide nada contigo o al menos no del todo. Te piensas a cuestionar realmente tu orientación; porque te das cuenta que hay algo en ti que no es común o corriente. No necesitas esa conexión con la otra persona ni tampoco tu cuerpo lo demanda, así de sencillo es para mí. Aunque el resto lo cuestiona o lo señala como muy particular”.

De manera similar, algunas personas que podrían pertenecer de forma técnica al área gris eligen identificarse como asexuales ya que es más fácil de entender. Por ejemplo; si alguien ha experimentado atracción sexual una o dos breves, fugaces ocasiones en su vida, podrían preferir llamarse a sí mismo asexual puesto que no merece la pena la molestia de tener que explicar estas una o dos ocasiones a todo el mundo que pregunta por su orientación. Yaiza nos aclara “Puedes ver a alguien estéticamente atractivo pero no tienes el incentivo de llegar a más, no le ves nada interesante a lo que los otros buscan. Te sientes apartada por que tus allegadas tus amistades te miran y te cuestionan cuando vas a perder la virginidad, tú te autoevalúas y sientes que no es algo que vaya contigo es mas ni si quiera te importa. No entiendes por que los otros se preocupan tanto por tener sexo, ni si quiera porque lo buscan, no es un postre que te apetezca ni consigue llamar tu atención”.

Los grisexuales también notan la diferencia que los separa de los alosexuales “Dudas tanto de tu sexualidad o falta y incluso te pones a prueba. Sientes apatía o ninguna conexión con el otro y puede que te atraiga algo sexualmente y sientas pero realmente no necesitas llegar a más, no crees que sea necesario. No sabes cómo comentarle al otro lo que sientes y menos aun cuando quieres a alguien y no puedes corresponderle sexualmente, a lo que él siente”.

La grisexualidad se considera una orientación sexual dentro del espectro gris de la asexualidad. Por eso hablamos de tres orientaciones, asexualidad, grisexualidad, demisexualidad.

La asexualidad se la define como la orientación sexual en donde el individuo no experimenta atracción sexual por una persona. La gris-asexualidad es una parte del espectro de la sexualidad que está cerca de la asexualidad. Los gris-asexuales (gris-as/gris-a) pueden no querer identificarse como asexuales o alosexuales por varias razones. Un gris-asexual puede experimentar atracción sexual bajo circunstancias limitadas o en menor grado que las personas alosexuales. Un demisexual es una persona que sólo experimenta atracción sexual después de que se haya formado un vínculo emocional. Esta unión no tiene que ser necesariamente de carácter romántico.