¿Qué quieres decir con “sexo”?

¿Qué quieres decir con “sexo”?

Preguntas acerca de lo sexualmente no específico

Reconociendo la falta de atracción sexual

Creo que la gente debería hablar más sobre sexo. No, déjame reformular la frase. Me arrepiento de no haber empezado a hablar más sobre sexo en el pasado. Muchos asuntos se habrían aclarado antes. O no. Quizás no estaba preparada para ello.

La primera vez que me encontré con el término “asexual” y con la comunidad asexual online, fui reacia a considerarme asexual. Estaba demasiado mentalizada de que había algo malo con “aquella gente”, que simplemente eran inmaduros, especialmente después de leer algunos posts de adolescentes que simplemente parecían temer a la poderosa y desconocida experiencia sexual; temían crecer. Por aquel entonces me planteaba seriamente considerarme bisexual. Sólo unos meses después volví a AVEN, habiéndome plantado cara a mí misma y habiendo abandonado más ideas preconcebidas. Y pude leerlo con nuevos ojos, y reírme con la alegría de ver mis experiencias descritas, con la alegría de no estar sóla.

Una de las primeras cosas de las que me di cuenta fue del hecho de que la asexualidad era definida como la ausencia de algo que una persona asexual, por definición, no podría entender. “Asexual es una persona que no experimenta atracción sexual”. Este enunciado funciona para el mundo sexual, tiene significado para la gente “normal”. ¿Qué tal una definición internacional? ¿Cómo se siente una persona asexual desde dentro, sin referirse a algo que no es parte de su mundo? Una persona asexual al oír la definición oficial puede no identificarse con ella.

Yo ni siquiera había considerado nunca el hecho de que no experimento atracción sexual. Porque no se me ocurrió que yo fuese diferente a todas las personas a mi alrededor que actúan como si todos sintiéramos lo mismo. Me imaginé que debía de tenerla; siento atracción hacia la gente, debe ser sexual. Y siempre me sentí rara e insegura, porque en realidad no lo entendía, no lo pillaba. Era casi completamente misterioso para mí. Por supuesto, siempre he sido capaz de reconocer tiradas de caña sexuales muy obvias y evidentes, pero casi todas mis interacciones eran de lo más sutiles, y siempre había una pregunta insistente en el fondo de mi mente, en todas las relaciones, sobre si algo sexual estaba pasando o no. Siempre pensando -¿Es esto? Me gusta esta persona – ¿significa eso que quiero salir con elle? ¿Cuál era la fórmula mágica a través de la cuál la gente reconoce esto los unos en los otros? Prácticamente asumí que debía sentirme atraída sexualmente en cierto grado hacia casi todo el mundo que me gustaba, y hacia todes mis amigues. Que cualquier mirada, roce, gesto, expresión, palabra que indicase cercanía, podría ser vista como seducción, podría ser la sutil insinuación de alguien o podría significar algo. Preferí bloquear esto de mi conciencia la mayor parte del tiempo, porque era soportar demasiado. Pero al final me afectó, me encontré alternando entre ser muy abierta y muy reservada – no saber nunca cuándo amable es demasiado amable. Más que nada siendo más reservada de lo que me hubiera gustado ser – sólo para estar a salvo.

El año pasado tuve algunas conversaciones bastante gráficas y directas acerca de lo que la “atracción sexual” significaba en realidad para diferentes personas, y cómo la experimentaban. Y me dijeron que es algo EVIDENTE para ellos, que les golpea de repente y sin lugar a dudas, tienen fantasías sexuales específicas sobre la persona hacia la que se sienten atraídos, que es este mágico y maravilloso tirón, y todo eso. ¡Siento que estoy fuera del mundo! Cuando acepté que este asunto de la atracción sexual es simplemente algo que no experimento ni tendría por qué experimentar, hizo maravillas con mi subconsciente y mi manera de mostrarme con la gente. Desde entonces me he sentido tan libre; como si un gran peso se hubiera liberado de mi espalda, el peso de tener que ser tan cuidadosa porque no sabes cómo funcionan las cosas y las relaciones humanas parecen no tener sentido para ti. Me siento mucho más a gusto ahora al mirar a la gente, tocarla, ser abierta con elles -y sé que la manera en la que quieran interpretarlo, es cosa suya. Porque sé de donde vengo y sigo probándome a mí misma. Y desde que he admitido mi asexualidad, he experimentado montones de atracción que me permito que salga según aparece, porque es justo lo que es, pero tener sexo con alguien o querer hacerles mi pareja no me ocurre, y es perfectamente aceptable. Puedo ser simplemente quien soy. No hay expectativas. Y si ese mágico y maravilloso tirón me pasa alguna vez, quiero ser capaz de permitírmelo de igual manera.

Entonces, ¿cómo podría ser la asexualidad descrita desde dentro, de manera que una persona asexual que no sepa de la asexualidad, pueda reconocerla cuando lea acerca de ella? Gran parte de mi auto-descripción se ha basado en la negación hasta ahora; ¿qué puedo decir de lo que sí que quiero?